Una mala salud bucodental se asocia habitualmente con la aparición de problemas aparentemente menores como las caries o la placa dental. Pero lo cierto es que el estado de nuestra boca influye de forma decisiva en el funcionamiento de nuestro organismo y puede ser el causante de determinadas patologías.
Hablamos de enfermedades que tienen la capacidad de afectar a nuestra calidad de vida e incluso de llegar a comprometerla. Es necesario cuidar y proteger nuestra boca porque es precisamente la puerta de entrada al organismo y el punto de partida del sistema digestivo.